jueves, 13 de diciembre de 2018

Sacerdote estadounidense acusado de abusar de niños filipinos espera deportación

Un sacerdote de los Estados Unidos ha sido arrestado en Filipinas debido a denuncias de abuso sexual. La Oficina de Inmigración de Filipinas anunció el jueves pasado que el padre Kenneth B. Hendricks había sido arrestado el día anterior en la ciudad de Naval en la isla de Biliran. Después de su arresto, las autoridades tuvieron al padre Hendricks fue llevado a Manila, la capital de Filipinas.

Sacerdote acusado de abusar de los niños filipinos del altar espera deportación a los Estados Unidos
Cura Kenneth Hendricks, violador de niños

Había una orden en contra del padre Hendricks. El arresto del cura Hendrick fue realizado después de que un tribunal de Ohio acusara al sacerdote de 77 años de edad por cargos de abuso sexual de menores en Filipinas. La conducta sexual ilícita en suelo extranjero es un delito federal que se castiga con hasta 30 años de prisión. Hay posibilidades de enjuiciamiento penal tanto en los Estados Unidos como en Filipinas.

La portavoz de inmigración filipina , Dana Sandoval, dijo en un comunicado : "No permitiremos que los depredadores sexuales se aprovechen de nuestros niños. Las personas como él deben ser expulsados de Filipinas".

El cura Hendricks vivió en Filipinas durante unos 37 años, pero proviene de Cincinnati, Ohio. Benjamin Glassman, abogado de EE. UU para el Distrito Sur de Ohio, dio una conferencia de prensa en Cincinnati el jueves pasado junto con varios agentes de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) que se encontraban investigando el caso.

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Un total de 10 hombres en las Filipinas han presentado declaraciones acusando al padre Hendricks de abusar sexualmente de ellos cuando eran niños. El padre Hendricks se encontró con los niños a través de su trabajo como sacerdote, y varios de ellos eran servidores del altar (monaguillos). Las víctimas dicen que eran tan sólo niños de 7 años cuando ocurrió el abuso. Algunos relatan que el padre Hendricks, después de hacerse amigos y de llevarlos a la ducha, los asaltaba sexualmente en una bañera. Una víctima dijo que el abuso sexual comenzó en 2009 cuando tenía 12 años.

Según un comunicado de prensa del Departamento de Justicia de los Estados Unidos (DOJ, por sus siglas en inglés), "se dice que insistió a las víctimas en que se bañaran juntos, en ocasiones él estaba sólo con uno o con otros niños. El sacerdote amenazó a las víctimas diciendo que si le decían a alguien ellos irían a la cárcel ". También informaron que el padre Hendricks "tenía una cantidad de niños menores que residían con él".

Las declaraciones de cinco de las presuntas víctimas se registraron en documentos judiciales fueron revelados el jueves pasado; los otros cinco presentaron sus acusaciones después de que se presentó la denuncia penal.

La arquidiócesis católica de Cincinnati tiene al Padre Hendricks en un listado en línea como "misionero": alguien de la arquidiócesis que ha ido al extranjero como parte de una vocación sacerdotal o religiosa. Tras las noticias de las acusaciones contra padre Hendricks, la arquidiócesis actualizó la página web con un apéndice que decía: "El padre Hendricks no es, ni nunca ha sido, sacerdote de la Arquidiócesis de Cincinnati".
Además, en un comunicado emitido por la arquidiócesis manifestaron: "Aunque no es un sacerdote de la Arquidiócesis de Cincinnati, el Padre. Hendricks figura en nuestro sitio web como un misionero católico que sirve en Asia. Es uno de los 75 misioneros del sudoeste de Ohio que reciben apoyo financiero de la Oficina de la Misión de la Arquidiócesis. Ninguno de estos individuos trabaja para la Arquidiócesis de Cincinnati, ni son responsables de ellos".

Antes de viajar a Filipinas, el padre Hendricks era un hermano franciscano en Cincinnati. Ingresó a los franciscanos en el convento de San Antonio en Cincinnati en 1962, tomando el nombre religioso de Hermano Pío. Finalmente dejó la orden y fue dispensado de sus votos en 1986 (después de mudarse a Filipinas). Aparentemente pudo ser ordenado sacerdote en las Filipinas.

A los investigadores federales les preocupa que el padre Hendricks podría haber victimizado incluso a más niños a lo largo de los años, ya sea en Filipinas o en los Estados Unidos. Mientras vivía en Filipinas, el padre Hendricks hizo visitas todos los años a Cincinnati, a menudo permaneciendo allí varios meses al año. Un portavoz de HSI dijo en la conferencia de prensa del jueves pasado: "Teniendo en cuenta lo que sabemos hasta ahora, creemos que existe una alta probabilidad de que otros niños se hayan visto afectados por sus supuestas acciones".

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