Cardenal Tobin, obispo de una diócesis LGTBI friendly
“Es un lenguaje muy desafortunado”, dijo Su Eminencia en relación con la doctrina de la Iglesia sobre la homosexualidad. “Esperemos que con el tiempo la redacción sea un poco menos hiriente”.
Elevado al cardenalato por el actual pontífice, el cardenal Tobin es uno de los obispos norteamericanos que debe su diócesis a los "buenos oficios" del defenestrado ex-cardenal Theodore McCarrick, retirado del ministerio sacerdotal por un caso de pedofilia y decenas de casos de abusos homosexuales sobre seminaristas y jóvenes sacerdotes. Pertenece, junto con Blaise Cupich, de Chicago, y Kevin Farrell, ahora en la Curia, a esa tríada de purpurados favorecidos por el arzobispo emérito de Washington a los que la fortuna ha sonreído con Francisco, que les ha mostrado en numerosas ocasiones su favor.
Cardenal Tobin y el Papa Francisco
El comentario del cardenal es cualquier cosa menos "un hecho aislado" en la jerarquía actual; de hecho, lo excepcional es encontrar un prelado que recuerde la doctrina en este punto. De hecho, el cardenal Tobin es uno de los protectores del jesuita padre James Martin, el asesor del Vaticano para las comunicaciones que también ha lamentado en diversas ocasiones el "lenguaje" del Catecismo en este punto. En concreto, el padre Martín sugería cambiar “objetivamente desordenado” por “diferentemente ordenado”.
También los obispos alemanes anunciaron recientemente, por boca de su presidente, el cardenal Reinhard Marx (que se sientan en el exclusivisimo Consejo de Cardenales que asesora al Papa), que se disponen a "revisar" toda la doctrina católica sobre moral sexual y que pretenden hacer vinculantes sus conclusiones.
Para el cardenal Tobin al referirse a la homosexualidad es hiriente
No hay comentarios:
Publicar un comentario